martes, 4 de marzo de 2008

EL AYER SOLO ES RECUERDO

Solo me acuerdo de ayer, palabras del negro.

No puede ser, dijo el medico de la sala de primeros (y únicos) auxilios de ese barrio. Vos te tenés que acordar de mucho más o de nada.

No, insistí, solo me acuerdo de ayer, pero esto me pasa hace mucho. Solo ayer, pero nunca el mismo ayer. Mañana me acordare de usted o de vos, pero pasado quizás no. O sea, usted o vos existe en la vida el tiempo que mi memoria y mi cerebro deciden.

Eso mismo decía el Obispo Berkeley, dijo el Dr. Cabrera, Orlando para más datos. Aja, pero yo no lo conozco al señor ese y no me acuerdo de él.
Pero es que vivió hace siglos, replico Cabrera, que se estaba poniendo enojado.

Ja, mira si te voy a creer que lo conociste, es más hasta pudo no haber existido y es un engaño de otro que le pasó lo mismo que a mí. Ayer me dijeron que solo el que miente perdura a través del tiempo. Ahora no se si soy un mentiroso o un tipo honesto. En realidad, como solo tengo una memoria selectiva, me da lo mismo decir la verdad que mentir porque no tengo tiempo para reconocer una de otra. Y si sigo hilando fino la verdad para mi es una mentira adornada para ser presentada en sociedad.

Ah, entonces puedes que recuerdes todo, insistió Orlando, y no seas amnésico. Que me mientas para no recordar el tiempo pasado, más que un ayer condenado a la desaparición inmediata.

No se, yo se que me acuerdo de ayer, y la verdad eso de que fuimos o que somos amigos lo tomo como novedad, porque ayer yo no lo conocía a usted. Y mañana posiblemente lo sienta mi amigo, pero ya pasado no.

Mire Evelia, se dirigió a mi tía, la verdad es que es un caso único, nos vemos una vez al mes y no se acuerda que me conoce, a ustedes ¿tampoco?

No Orlando, se levanto así quince días y nada, no recuerda más que un día, el anterior. Solo pueblan su memoria las personas que están en ese espacio efímero del ayer. ¿Que le parece que hagamos doctor?

Hmmm, dijo el medico, mirando a su amigo, el que estaba con la mirada perdida en algún punto de la mancha de humedad en esa pared descascarada, mire Evelia, déjelo así nomás, porque la verdad que para lo que tiene como recuerdos mejor amnésico y descerebrado, el tiempo todo lo cura y su locura necesita tiempo.

Roberto b

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